miércoles, 1 de julio de 2009

UN MODELO PARA SU CASA / Su disciplina


Se levanta aun de noche y da comida a su familia y ración a sus criadas. Prov. 31: 15

Disciplina 1 – Un comienzo temprano. En la época que se escribió Proverbios 31, la mujer se levantaba temprano por varias razones: se ocupaba del fuego de la casa. Esa pequeña lámpara, exactamente un plato lleno de aceite con una mecha de lino flotando en él, se mantenía encendida toda la noche de modo que, a la mañana, el fuego de la casa pudiera ser encendido con ella. Esta mujer se levantaba varias veces durante la noche para agregar aceite al plato, evitando así que la lámpara se apagara.

Disciplina 2 – Alimentos para la familia. El pan diario para la familia era una de las razones más importantes por las cuales ella madrugaba. El pan era el alimento de cada día.

Disciplina 3 – Un plan para el día. Repartía trabajo a los que estaban dentro de la casa, planeaba y organizaba su día, su tiempo y las personas que estaban a su cargo.

Analizando estas tres disciplinas, podemos decir que levantarse temprano no es fácil, no es sencillo de lograr, pero es necesario y esto trae muchas bendiciones para ti y para los tuyo. Levántate temprano y pasa tiempo a solas con Dios. La mayor queja que siempre escuchamos de las mujeres es que no tienen tiempo… parece que siempre están los niños para atender, o el teléfono, y parece que es imposible encontrar un poco de paz y tranquilidad para tener un tiempo a solas con Dios. El levantarnos temprano nos proporciona estos momentos en que podemos disfrutar del tiempo a solas con Dios. Podemos pasar algunos momentos de oración, pidiendo su bendición para nuestro día y el de nuestra familia.

Ann Graham, la hija de Billy y Ruth Graham dijo: No importa a qué hora me levantara por la mañana, siempre veía una luz encendida en la habitación de mi madre. Cuando bajaba, ella ya estaba sentada en su escritorio leyendo alguna de sus catorce traducciones diferentes de la Biblia. Esta es la manera en que mi madre me enseñó que es mediante la Palabra y la oración que lo podemos conocer a Dios. Necesitamos el tiempo para planear nuestro día, no podemos levantarnos y empezar a hacer lo primero que nos parece, sino que tenemos que organizarnos qué cosas vamos a hacer luego de tener un tiempo a solas con Dios, quizá empezar con el desayuno, quizá adelantar la preparación del almuerzo, quizá ordenar la casa, pero no podemos empezar a hacer cualquier cosa en cualquier orden. Todo lo debemos hacer, cocinar, limpiar, planchar, hacer las compras, pero en un orden, porque las mas beneficiadas… seremos nosotras.

Prueba esta semana, levántate un poco más temprano que siempre, lee tu Biblia, medita en ella, ora por los tuyos, organízate tu actividad diaria, y luego de unos días, evalúa si todo a tu alrededor ha mejorado. Posiblemente sí.

Pero para poder levantarte temprano… tienes que determinar una hora para hacerlo, no es solamente decir: Mañana me levanto temprano… si me despierto. NO. Es establecerte un horario de levantarte y hacerlo. Si un día tienes que viajar y tomar un colectivo a las 7 de la mañana, como mínimo necesitarás levantarte a las 6 para estar lista a las 7. Hazlo de esa forma, establece un horario para levantarte. También establece un horario para acostarte. Yo sé, a mí también me gusta mirar televisión, pero necesitas establecerte un horario para dormir, de lo contrario, será imposible que puedas levantarte temprano.
Cuando te acuestes, ORA, para que tus últimos pensamientos estén en su Palabra y no en tus problemas. Y por último, LEVANTATE. Cuando estudiaba para la facultad, muchas veces tenía que levantarme a las 5 de la mañana para terminar de estudiar. ¿Sabes algo? Para situaciones como esas, nos levantamos temprano y estamos todo el día en actividad, pero cuando es para dedicarle un tiempo a Dios y organizar nuestro día, parece que no es tan necesario, total… Dios me escucha en todo momento. No te dejes llevar ni controlar por tu mala administración del tiempo. Este es el día para empezar a organizarte. Recuerda: ACUESTATE temprano, LEVANTATE temprano, MEDITA EN SU PALABRA, ORGANIZA tu día, y EVALUA la mejora en tu familia y en tu vida.

BENDICIONES. EMPIEZA HOY.

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